
Acorde con el reconocido cuento de Shiva o Shivapurana, Parvarti se encontraba muy sola y desprotegida cuando su marido se ausentaba. Así que ella decidió crear un niño por sí misma, y un día mientras se estaba bañando, en plena soledad, se frotó el cuerpo, y con los ungüentos perfumados que surgieron de él, modeló la forma de un joven, tan glorioso y guapo como la luz del día. Luego, le dio la vida y lo llamó Vinayaka, ordenándole que fuese el guardián de la casa. Cuando Shiva volvió a su hogar se encontró a un joven desconocido vigilando la puerta del baño de su mujer. Shiva intentó entrar en el baño donde estaba Parvati y el joven trató de impedirle el paso, y Shiva le cortó la cabeza con su tridente en un ataque de ira ... Parvarti se quedo desconsolada y Shiva, incapaz de encontrar la cabeza del joven, le pidió a sus guardianes, los Ganas, que buscaran una cabeza de la primera criatura viva que encontraran. Trajeron una cabeza de elefante y Shiva la colocó en el cuerpo y le dio vida de nuevo; lo llamó Ganesha. Tratando de reparar su gran fallo, reconoció a Ganesha como su hijo, le dio poderes, entre otros el ser guardián de las puertas como tributo a haber protegido a su madre; también, el ser el señor de los buenos comienzos, decidió que debía de ser venerado por cualquier devoto que desease obtener éxito en la vida.
Un buen ejemplo de esto son las bodas; los novios le invocan para ganar su bendición. Los calendarios del año nuevo son otra buena ocasión donde aparece su imagen como portadora de buena suerte y protección en el año nuevo que comienza. Así mismo Shiva lo convierte en el jefe y señor de sus Ganas o guardianes. El Hijo de Shiva fue y es venerado a lo largo de todo el país, y en todos los pueblos y ciudades tienen al menos un templo o altar dedicado a él. Entrando en cualquier templo indio dedicado a Shiva, el visitante se encontrará con Ganesha antes que con cualquier otra deidad ... En India, el contacto visual del devoto con los ojos del Dios es muy importante, es la razón prioritaria para visitar un templo; así la suplica se hace de una forma directa. Si no se hace este ritual visual, los poderes del dios no se manifestaran. (Es curioso observar en los diferentes templos de todo el país cómo todas las figuras están a la altura de nuestros ojos.) En el Sureste asiático, concretamente en Vietnam, la civilización Champa fue muy famosa por el culto a Shiva. Ganesha llegó allí con Shiva justo antes del periodo Angkhor (siglos VII-VIII), lo que se menciona en las inscripciones de los templos.
¿Pero de qué forma se manifiesta Ganesha? Las Sagradas Escrituras siempre nos describen un cuerpo de niñ
o con cabeza de elefante que nunca se convirtió en adulto. Nos hablan de que el color principal de este dios es el rojo, aunque también tiene otros colores, como el azul, naranja, rosa o negro. Desarrolla varias formas y funciones bajo su liderazgo; éstas tienen diferentes nombres y cada uno de ellos diferentes colores. Normalmente dispone de 4 brazos, pero puede tener 2, 6, 8, 12, e incluso 16. Las figuras con dos brazos son las más antiguas y las más difíciles de encontrar. La mano en posición desplegada con los dedos hacia abajo o varada mudra muestra su gran pasión por ayudar a aquéllos que le invocan. La mano desplegada con los dedos hacia arriba o abhaya mudra es el gesto de aquél que no tiene miedo de nada y que suprime los obstáculos y garantiza una protección divina. Normalmente, las manos de Ganesha sujetan sus atributos o emblemas. Estos objetos tienen una simbología muy particular de los poderes o funciones de este dios. Algunos de estos emblemas pueden considerarse armas, usadas para luchar contra las fuerzas negativas, demonios, etc. Hay diferentes teorías sobre los atributos que sujeta Ganesha en cada uno de sus brazos, pero los más frecuentes aseguran que porta un colmillo de marfil roto que es un talismán que protege del demonio y de otros impedimentos; un hacha para luchar contra las penas y los peligros del devoto; una flor de loto cerrada que representa su pureza espiritual, y un plato de caramelos que ingiere poco a poco con su trompa y que le dan fuerzas para cumplir sus cometidos (acepta con gusto este tipo de ofrendas en su altar). Ganesha suele estar representado, desde tiempos inmemoriales, con una sola cabeza; aunque existan múltiples estatuas con muchas cabezas, no suele ser lo común. Tiene dos ojos y muchas veces aparece un tercero en su frente, «el ojo que todo lo ve», entre sus cejas como su padre, Shiva. El cuerpo de Ganesha es generalmente curvo, torcido hacia la izquierda. Es la forma en la que el se enfrenta a los obstáculos, los rodea y consigue eliminarlos ... Las orejas de Ganesha son enormes. Son lo suficientemente largas como para escuchar todas las plegarias y súplicas de los devotos y para separar las peticiones que realmente son importantes de las que no lo son. Su peinado suele ser un moño, de pelo rizado, asociado al pelo rastafari de los ascetas, adornado con una corona o diadema llena de campanitas. Este tipo de pelo lo heredó también de su padre Shiva. El vientre es muy grande, simboliza que el hombre que hace los esfuerzos suficientes para seguir el buen camino espiritual del progreso, buscando la verdad, puede comer y digerir todas las experiencias necesarias que está viviendo. De esta forma, se mantiene equilibrado con una actitud estable. El vientre suele estar decorado con un cinturón hecho de serpiente. La serpiente o "naga" simboliza la imagen del guardián; está directamente relacionada con su padre. La imagen de la serpiente es frecuente en India; son animales sagrados a los que hay que cuidar. Se desplaza encima de un ratón. La proximidad de los ratones en los templos a las ofrendas de comida hechas a Ganesha sugeriría una conexión práctica entre Ganesha y su vehículo. Alguna leyenda relata sobre e
ste tema, sugiriendo que a lo mejor son las ratas las que recogen la comida del plato en los templos y se la ofrecen a su dios. Otros comentan que existe una paradoja relativa al tamaño del ratón comparado con el tamaño del elefante. Ganesha suele estar sentado en las rodillas de su madre Parvati o a sus pies. Hoy en día se sigue investigando a fondo sobre el origen, funciones y atributos de Ganesha. Artesanos de toda Asia han reproducido y trabajado la imagen de este dios en diferentes materiales, entre otros, piedra, pintura, jade, madera o hueso, y a lo largo de la historia han ido caracterizándolo de una forma concreta en cada país. Grandes museos como el Metropolitan de Nueva York o el Museo Británico poseen ejemplares muy valiosos.
Texto basado en la publicación de Angela De La Rosa Rato.
Imágenes tomadas de distintas pág web
Un buen ejemplo de esto son las bodas; los novios le invocan para ganar su bendición. Los calendarios del año nuevo son otra buena ocasión donde aparece su imagen como portadora de buena suerte y protección en el año nuevo que comienza. Así mismo Shiva lo convierte en el jefe y señor de sus Ganas o guardianes. El Hijo de Shiva fue y es venerado a lo largo de todo el país, y en todos los pueblos y ciudades tienen al menos un templo o altar dedicado a él. Entrando en cualquier templo indio dedicado a Shiva, el visitante se encontrará con Ganesha antes que con cualquier otra deidad ... En India, el contacto visual del devoto con los ojos del Dios es muy importante, es la razón prioritaria para visitar un templo; así la suplica se hace de una forma directa. Si no se hace este ritual visual, los poderes del dios no se manifestaran. (Es curioso observar en los diferentes templos de todo el país cómo todas las figuras están a la altura de nuestros ojos.) En el Sureste asiático, concretamente en Vietnam, la civilización Champa fue muy famosa por el culto a Shiva. Ganesha llegó allí con Shiva justo antes del periodo Angkhor (siglos VII-VIII), lo que se menciona en las inscripciones de los templos.
¿Pero de qué forma se manifiesta Ganesha? Las Sagradas Escrituras siempre nos describen un cuerpo de niñ


Texto basado en la publicación de Angela De La Rosa Rato.
Imágenes tomadas de distintas pág web